En gramática conjugamos el verbo sentir, nos lo aprendemos para hablar correctamente según las normas de concordancia de nuestra lengua, pero ¿cómo trasladamos su significado a nuestra vida cotidiana?, aquí comienza el espíritu de la poesía.
Cualquier persona o realidad por simple que nos parezca nos evoca un sentimiento (una lagartija, una mariposa, el colegio, la patria, un jinete, un marinero…) al que le damos sentido y asociamos a otros significados, creando así las figuras retóricas. Algunos/as deciden dejarlos plasmados y otros, simplemente, dejamos volar nuestra imaginación, pero en ambos casos todos/as construimos nuestra propia poesía de la vida.
El departamento de Lengua y Literatura, el Plan de bibliotecas y ComunicA, el Día Mundial de la Poesía se propuso que el alumnado de nuestro centro sintiera la lírica de otras vidas, porque será la base de donde partan para sentir la inspiración y componer la suya propia.
Asimismo, Antonio Machado, Federico García Lorca, Gloria Fuertes, Emilio Prados, entre otros, nos trasladaron sus emociones a través de elementos mundanos. Os invitamos a observar todo lo que os rodea para convertir en bello el elemento más insignificante.
“Podrá no haber poetas pero siempre habrá poesía” (Gustavo Adolfo Bécquer)
